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La pasada semana recibimos la visita de Francina Casamitjana, quien vivió en la antigua masía hasta 1950
El Real Club de Tenis Barcelona-1899 recibió una visita muy especial en la persona de Francina Casamitjana Marimón, perteneciente a la última familia de inquilinos de la Masía de Can Canet de la Riera, actual sede de nuestra entidad. Francina, de 94 años de edad, no había estado en la que fuera su casa desde 1950, dos años antes de que el RCT-1899 comprara la Masía y sus terrenos para construir la nueva sede del club.
A pesar de esas siete décadas de ausencia, y de la enorme transformación de la finca, Francina recordaba muy bien la antigua Masia. “Todo el entorno está muy cambiado, pero la Masía en sí es muy reconocible. La entrada estaba más adelantada, llegando a lo que ahora es casi la entrada al Liceo Francés, y con dos grandes acacias en la puerta. La calle, ahora asfaltada, era como el cauce de una riera y los terrenos estaban llenos de algarrobos, con un pozo y un estanque en el que nos bañábamos en la parte posterior”, explicó Francina.
Del interior de la Masía, explicó que en la actual sala de Trofeos estaba la cocina con su chimenea, que la Sala de Juntas estaba ocupada por el dormitorio de sus abuelos, y que la parte más elevada, lo que en la actualidad es la Sala de Estudios, era donde se guardaba el grano y las distintas cosechas.
Como anécdota interesante, Francina explicó que la figura que estaba en la hornacina de la entrada de la Masía no era la de una Virgen, sino que era una figura de San Isidro, patrono de los labradores.